[Crítica de libro] "The Never Hero" de T. Ellery Hodges

Título original: The Never Hero

Autor: T. Ellery Hodges

País de Nacionalidad: Estados Unidos

Editorial: Foggy Night Publishing

Año de publicación: 2014

Nº de páginas: 429 (12 hrs 22 min de audiolibro)

El día en que Jonathan Tibbs es hallado inconsciente en su cocina, sin heridas y sobre un charco de su propia sangre, marca el momento en que todo cambiará en su vida. Sumido en el más desconcertante anonimato, Tibbs comienza un recorrido en el que se verá obligado a cumplir con un rol de guerrero para el que no está nada preparado y según el cual opta por tomar decisiones radicales que levantarán las sospechas de más de algún conocido. Sin embargo, aún con toda la atención que comienza a recibir, su papel en la salvación de la humanidad no puede ser recordada por ninguno de los involucrados más que por sí mismo.

No one but he could see or remember. His story could never be like theirs; his alter ego could never be unmasked. He would never be the hero revealed, and therefore, never the hero.

¿Es posible ser un héroe sin el reconocimiento de otros? ¿Dónde se marcan los límites del concepto?

Gran momento. Al fin leí The Never Hero y valió la pena todo el lío de conseguirlo. Parece broma que esta trágica intro se sigue repitiendo con cada review que me toca hacer pero el esfuerzo siempre me recompensa con buenos hallazgos, como éste.

¿Que qué pensé? Que es un libro al borde de ser un essay. Demasiado comprometido con su afán de cuestionar conceptos que no cuestionamos a menudo. Aún así, no se van tan en la profunda en ningún momento; los saltos de desarrollo ocurren gradualmente, los giros de trama son dignos de un seguidor de Orson Scott Card, y los personajes van cambiando frente a nuestros ojos acordes a sus experiencias, como la vida misma. Todo muy sensato, muy equilibrado.  

La novela parte lenta pero no a un ritmo desesperante. Solo se toma su tiempo en contextualizar al protagonista, pero porque es necesario, porque necesitamos entenderlo bien para sopesar su posterior crisis. Jonathan es una persona de bajo perfil, sin características físicas llamativas ni un particular grado de inteligencia. Es un alguien tan ordinario que a ratos se pierde entre la miríada de buenos personajes a su alrededor. Después del incidente, sufre de trastorno de estrés post traumático y depresión y cuando ya empieza a ir cuesta arriba sucede lo impensable: su pecho comienza a brillar y su cuerpo se quema por dentro, inmovilizándolo de dolor. Cuando recupera la conciencia, se entera de que posee súper fuerza y de que en la ciudad apareció un monstruo y está matando a todo el mundo. ¿Coincidencia? No lo creo.

Este es un libro que no teme a declarar abiertamente lo que trata de hacer: deconstruir un tópico clásico. EL tópico clásico. Dos de los personajes secundarios (un católico y un nerd ateo que siempre están discutiendo las similitudes entre Jesús y Superman) tocan el tema de “El Mito del Héroe” a cada momento que pueden y es fascinante; se vuelve un libro excesivamente meta, pero que no lo hace parecer forzado ni innecesario, es orgánico, preciso y maravilloso. Y si bien reconozco que mi debilidad son las historias de deconstrucción, esta es en serio una novela que me sorprendió en muchos niveles. En primer lugar, el protagonista tiene un desarrollo consistente y legítimo, y es satisfactorio que esto sea posible dado que es una característica que generalmente queda opacada por el heroísmo del sujeto o reducida a los problemas propios de su búsqueda. En cambio, Jonathan es un tipo blandito, pasivo y borderline cobarde con un cierto olorcillo a Frodo Bolsón (quizás por lo llorón o porque, si lo miramos bien, es la misma historia con un giro moderno). Se siente víctima de sus circunstancias (y quizás lo es) y su repunte tiene que ver con el hacerse agente de su propia narrativa, tal como dijo un viejo mago alguna vez: “Todo lo que tenemos que hacer es decidir qué hacer con el tiempo que nos es dado” (segunda referencia a El Señor de los Anillos, I'm not even sorry). En segundo lugar, los personajes secundarios (los housemates, el padre de Tibbs y por supuesto Hayer, el Gandalf alienígena) resultan complejos y relacionables, y hay de hecho un momento particular con Hayden que es muy conmovedor y reivindica bastante el rol activo de los secundarios; Jonathan de verdad se nutre de la incidencia de estos personajes en su historia y eso los vuelve imprescindibles y memorables. Tienen personalidad, tienen relevancia… y además tienen el beneficio del PoV múltiple, que es el mejor recurso de la narrativa contemporánea. Por último, la acción y la tensión están muy bien abordadas, y solo eso; la acción era emocionante y la tensión incómoda a morir. Yo diría que es una victoria hacerme sentir vergüenza ajena tantas veces en un centenar de páginas y hacerme temer tantas veces por la vida del protagonista aun cuando se, de antemano, que existe una secuela, y por tanto es imposible que sucediera. Uf, me acuerdo y me dan ganas de llorar.

Si no me atrevo a darle un reconocimiento mayor, es porque realmente no encuentro que sea un libro perfecto, es porque cuando pienso en el feeling general que me da The Never Hero, pienso en todo lo mencionado anteriormente, pienso en el color de sus conflictos y en los diálogos bien logrados, pero topo siempre en los 2 personajes femeninos que lamentablemente aparecen a cada rato y son muy importantes para la trama. Las mujeres en este libro son pocas y se mantienen dentro de los estereotipos femeninos más tragicamente comunes: entre No-Soy-Como-Las-Otras-Chicas, Amiga Maternal y Mary Sue, y se vuelven aburridos los momentos con ellas. Aun cuando supongo que tendrán otro tipo de rol en la historia más adelante, creo que aquí está la debilidad del autor en cuanto a dominio del medio.

En general, sigue siendo un gran acierto. Estaré siguiendo de cerca a T. Ellery Hodges y sus futuras obras. Lo amo.

Recomiendo el libro a: fans de Boku no Hero Academia, quienes gusten de las maravillosas deconstrucciones de tópicos clásicos, quienes busquen una voz nueva y una historia diferente a lo que ya tenemos de sobra en fantasia urbana, LoTR fans quizás. lol.

Nota personal: 4,9 / 5