miércoles, 7 de marzo de 2018

[Crítica de libro] "La Tierra del Mago" de Lev Grossman


Título original: The Magician's Land
Autor: Lev Grossman
País de Nacionalidad: Estados Unidos
Editorial: Plume
Año de publicación: 2014 
Nº de páginas: 402





Lo cierres son extraños y alienígenas. Los terceros libros siempre van cargados de un algo desagradable, un aura de forcejeo entre querer dejar ir y no. Por eso tengo problemas para llegar a un cierre de trilogía libre de prejuicios y expectativas: ya he recorrido muchas veces ese camino y siento que siempre los empiezo esperando ciertas cosas. En este caso, creo que esperaba un choque o algo más remecedor que me recordara que seguía en el universo cruel y traicionero que Lev Grossman preparó y blandió como espada en los primeros dos tomos.

En cambio, siento que esta entrega fue relativamente benévola comparada con la anterior, y si "El Bosque Mágico" me pareció en algún momento perfecta en cuanto a las decisiones del autor, "La Tierra del Mago" se sintió menos como una coherente deconstrucción y más como un conjunto de relatos conciliadores y predecibles que en ningún instante te sacan de quicio de la misma manera que los otros pudieron.


Y creo que ahí se resume mi impresión: "La Tierra del Mago" es sumamente tranquilo, un libro casi silencioso; se perdieron en el camino los grandes contrastes entre lo esperable y lo sorprendente y el autor te lo entrega todo sin mayor conflicto de por medio.

(Ligeros spoilers adelante)

La introducción de nuevos personajes también estropeó un poco las cosas. Plum tiene la gran ventaja de ser un punto de referencia para darnos a entender que no todos son miserables en el mundo de la magia (como se sugirió en "Los Magos" al plantear una relación entre el potencial mágico y el dolor, que era algo que me fascinó en su momento) sino que son solo los protagonistas. Sin embargo, lo que de verdad intentó hacer el autor es posicionarla de manera que Quentin pudiese generar un vínculo de mentor con ella para así finalmente poder cerrar el capítulo del desarrollo del protagonista. Esto solo funcionó superficialmente, ya que en los capítulos desde el punto de vista de Plum, vemos y conocemos a Quentin, pero desde el punto de vista de Quentin, no vemos ni apreciamos realmente a Plum. De modo que finalmente el personaje queda como una facilitadora y no como un alguien relevante. Plum termina siendo innecesaria, como Stoppard, Eleanor, Josh y Poppy. Todos personajes que se perfilaron como algo más y quedaron en nada. 
(Fin de los spoilers)

Si bien es una trilogía, con este último libro se trasluce la metodología del autor de abordar cada libro en orden sin planear el siguiente de antemano y se entiende que la saga, más que una historia dividida en tres partes, son tres historias bastante independientes. Viéndolo así, sin lugar a dudas se puede disfrutar mejor la experiencia de Quentin en los complejísimos mundos que Grossman nos regala.


Sí, es verdad que por ser un tercer libro le perdono más cosas, pero aún así "La Tierra del Mago" con mucho llega a ser satisfactorio, ni siquiera podría llamarlo preciso. Es más bien adecuado, pero muy muy lejos de lo que fueron sus predecesores.



Recomiendo el libro a: Quizás a quien haya quedado decepcionado con los dos libros anteriores? Este es tan diferente en atmósfera y ritmo que podría ser del gusto de quienes no soportaron lo denso y acelerado de los otros tomos de la saga.

También lo recomiendo a quienes busquen algo parecido a la saga Mistborn de Brandon Sanderson.

Nota personal: 3 / 5 (y con amor)












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